Recordando a Juana de Ibarbourou
Juana de América
En tierras de Melo, lugar de indios, lusitanos y
españoles, nace Juana Fernández Morales el 8 de marzo de 1892 En un entorno de
naturaleza, desarrolla una observación sencilla de lo cotidiano, con múltiples
expresiones, conectándose desde lo más escondido de su ser.
A los 18 años se va a Montevideo; esa mujer inquieta,
muestra ser una escritora con sed de pasión y glamour francés, reflejándolo en
un apodo pasajero “Janet de Ibar", hasta quedar por siempre como “Juana de
Ibarbourou". Reconocida como "Juana de América", se casa con la
literatura y vuela al mundo.
Leer “La higuera”, “La mancha de humedad” o “Raíz
salvaje”, para luego cerrar los ojos y permitirnos recrear cada palabra, en
toda su dimensión, es vivirla y comprenderla.
Años más tarde, permanece aislada en su residencia de la
Av. 8 de octubre, hasta que viaja a la eternidad el 15 de julio de 1979.
Juana, recluida y libre, por siempre recordada.
María del
Carmen Flores Latorre
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Aromas
“Rosas, rosas, rosas,
a mis dedos crecen
Juana nos decía,
mientras perfumaba
el aire con sus manos
florecían poesías
Zully García
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Serás tú
Serás raíz salvaje
invadiendo los montes,
por donde filtra el sol
sus lenguas de diamante.
Serás el Chico Carlo que
trae desde el río,
ese cántaro fresco del
agua cristalina.
Volverás en perfumes de
rosas y de nardos,
en la luna de plata y en
las noches de cobre.
Y serás muro fértil donde
trepa la hiedra,
sin temor de los dioses de
barro ni de piedra.
Y volverán tus manos como
lirios en flor,
en busca de la pluma que
le cante al amor.
Y será tu piel papel de
caramelo y miel,
y mi alma de león salvaje
o perro fiel.
Volverás siendo luz en
alas de luciérnagas,
y serás suave brisa con
aromas de azahares.
Llegas a mi ventana con
romances de un vals,
visillos y cortinas
comienzan a danzar.
¿Serás tú? Oh mi Juana! Mi
consejera y guía.
Ya no sientas nostalgias,
sé curiosa y espía,
lo que modestamente pretende
ser poesía.
Zulma Mastroianni
Fragmentos de la poesía, 1 er premio en el concurso “El leer no ocupa
lugar”
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A Juana
Por la noche oscura de tu
mirada, pasó la inspiración
infinita, desde la feliz exaltación de la vida, con aroma a
manzanilla, tu inefable
higuera o el vendedor de naranjas
hasta llegar al otoño de
tu existencia, con la elegíaca
evocación de momentos
felices, con el deseo de permanecer a
través de la comunión fértil, en la cual volverás
a la luz y a la vida.
Así será, así es ¡nuestra
Juana de América¡
Norma Pascual
(Prosa poética)
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Versos de diamantes
Lírico encanto de versos
van por senderos y valles
trascienden generaciones
sin que las décadas pasen.
Ayer lo vi a Chico Carlos
con naranjas en un balde
¡Dime chico dónde has ido
dímelo si ya cenaste!
Juana nos está esperando
mantel de brocato y encaje
la mesa está preparada,
uvas moscateles grandes.
¡Dime chico dónde has ido!
la fuente llora a caudales
entre violetas y aromas
sabor a miel de panales.
Autora: Bernarda Lima
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Sólo Juana
Juana, querida Juana de América
dulce y valiente, sufrida y
audaz.
Duelen tus versos
sencillos, profundos,
esos que nacen del sentir
de tu alma
desde tu ingenua pureza de niña
a la torridez de esa vida
adulta.
Versos transgresores de
mujer, mujer
que a tanto hipócrita
escandalizaba.
Limpiaste aquel dolor bajo
la lluvia
sintiendo tu pena aliviar
el agua.
La mueca del despecho tu
escondiste
fue la risa quien trajo las lágrimas,
y a veces en el pavor del
silencio.
Quisiste apenas ser,
solo Susana
con tu querido chico Carlo
jugar
bajo la sombra de tu
higuera amada.
Stella Masullo
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Esa Mañana
(A Juana)
“El dulce milagro”, ese
día,
que cumpliste “la
promesa”.
En esa “hora morada”
en que dos almas se besan.
Como una “raíz salvaje”
nuestros cuerpos se
enredaron.
“La tarde” caía plácida
y las ansias se calmaron.
“Te doy mi alma desnuda”
“como la primavera”,
flores,
“la enredadera” de mis
penas
se cubrió de mil colores.
La “fusión” de corazones
y “la sed” de nuestras
almas,
llenos de “melancolía”
callaron esa mañana.
Yanni Tugores
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Juana apasionada.
Y allí ella recibe la
distinción
de mejor poetisa,
Juana de América mientras
su corazón
sangraba heridas
invisibles,
cantaba al amor pasional,
al amor a la humanidad
mientras afuera, todas las
guerras
y violencias sacudían al
mundo.
¡Juana de América!
brillaba en sus letras
palabras y poemas
dedicados a la humanidad,
cántaros frescos
oasis de sed, paz y amor.
Ana Elisa Medina
Argentina.
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Juana
Naciste con horizonte de
sol
en tu Melo, un manto de
paz te cubrió,
empujada por el adentro
escribiste con amor,
alegría, penas, diáfana,
hermosa, te consagraste
en nuestra Juana de
América...
el tiempo está contigo
hoy es siempre todavía,
sagrado recuerdo, danza
con mesura
sacudiendo mis adentros,
navego en las letras de
uno de tus libros,
que guardan tu voz, de
noches calladas
y tal vez descubra tu
mirada en mi alma,
Y tú,
me siembras espirales de
sueños...
Mercedes Fracuelli Silva
(Uruguay)
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Romance a Juana
¿Qué será del feroz látigo
que aquella mano agitaba?
Castigará todavía
las azulinas campanas,
o se lo tragó la noche
que pasa por tu ventana.
¿Por dónde andará aquel
charco
que reflejara en el alba
unos sedientos gorriones
y espejos en la mañana?
En la noche de los grillos
que te canta -a veces
nada-
basta un roce de la luna
para que te abrigue el
alma,
en tu sentir verdadero,
de dulce belleza, Juana.
Ricardo Pérez da Costa –
*Tomado de las prosas
poéticas; El cerco azul, El charco,
La noche, de Juana de Ibarbouru
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A Juana de américa
Juana mi musa, la de Melo,
quien derramara en
silencio
ríos de tinta en sus
versos,
de amor, de dolor y
consuelo,
en poesías, prosas o
cuentos.
Guardaba su pelo negro
las fragancias del
invierno
y lágrimas frías, de
hielo,
donde ahogaba sus
desvelos.
En sus manos de pluma al
viento,
Derroche de colores
nuevos,
azahares, rosas, azucenas,
trigales y hasta una
higuera,
aún perfuman por ella
de Norte a Sur toda
América.
Marisa Hernández –
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Flor de pétalos alados
Soberbia soberana, en arte
verbal sostenida,
bella ninfa del huerto,
divinidad estival.
Flor de pétalos alados que
la brisa lleva al mar
al arroyo, a los ríos, agua
que corre , caudal.
Cada verso, sinfonía, pasiones en magia pura .
En América se expanden sus
cantares como espuma,
Las lágrimas de la vida
nunca apagaron su llama,
voz cantaba en silencio los dolores de su alma
evitando los espejos su
silueta se esfumaba.
Tras esos muros un día se
cerraron las ventanas,
muda quedaba la pluma y
los pétalos volaron.
Alba Marina Riverón
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Pensando en Juana.
La dulce Juana, tan
agraciada
provoca envidias y falsas
miradas.
Algunos creen que lo tiene
todo,
y la tristeza es quien la
acompaña.
Juana, la poco amada,
por su belleza es
codiciada,
ni todo el oro, ni la gran
fama,
logran calmar la inquietud
del alma.
Sus bellos ojos, por la
ventana,
buscan los versos que
luego atrapa,
en las poesías que con gran ternura,
regala al mundo desde la rambla.
Juana camina, en la
penumbra,
recuerda al padre bajo la
parra,
recitando versos de Rosalía,
que con los años, aún la
inspiran.
Verónica Alma Zinni-
Argentina
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Juana
Bella dama, con alma
alada.
Mira que TILO, está
jugando
con la sombra de tus
parras.
Más allá, la calle se
llena de campanillas,
tan azules como hadas.
Y una mariposa, en bella
sinfonía,
cerca del ventrudo de
barro que acompaña.
Perlas tiene de rocío,
ese cántaro fresco
que habla, con la bella
musa.
Tu luna amada de Cerro
Largo
al alcance de tu mano ,mágica Juana.
María Cristina Curbelo.
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Raíz, Rosa y Viento
“Mi destino será el mundo
a través de los vidrios de mí ventana”
Juana de Ibarbourou
¿Cómo escribir sobre Juana
sin tener en cuenta sus
dolores?
Tras su gran pluma dorada
se escondían días de
violencia
y hasta una triste
adicción.
Si ella se escondía tras
su ventana,
sus letras volaban para
transgredir.
Enfrentó su silencio y
sumisión
bajo el influjo de su ,alter
ego literario.
Su poesía la liberaba de
la prisión
escribiendo al amor y a la
naturaleza,
una lluvia de letras que
emocionan
y reflejan su sensibilidad
y pasión.
En este punto cambio mí
pregunta:
¿cómo no escribir sobre
Juana
si su legado es Raíz, es
Rosa y es Viento?
Marcela Barrientos
Argentina
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Mis versos para Juana
A veces infantil,
a veces transgresora,
tu pluma me emociona
Y a veces me sonroja.
En la "mancha de
humedad",
He visto héroes, duendes,
y rosas,
que han plagado mis
paredes,
con tu imaginación
prodigiosa.
Y en las "lenguas de
diamante",
de tu erótica poesía
fogosa,
he soñado con secretos
amantes,
en tus páginas lujuriosas.
Juana, elegida de las
musas,
que con tus letras
esplendorosas,
has grabado en mi corazón,
por siempre... tu obra
fabulosa.
Graciela Mila
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Juana de américa
¡Oh...maravillosa Juana!
que con sabia maestría,
"amor y belleza"
hermanas
en sentida poesía.
Con expresión natural,
cantas a la selva y al
río.
Y en forma sentimental,
a la vida y sus desafíos.
Evocas como en un ritual,
con noble sinceridad
y desnudez espiritual,
a la muerte y a la
soledad.
Apasionada y sensible,
a veces bíblica y mística.
Pero genial e inolvidable,
eres dueña de rica lírica.
Nerea Inés Álvarez-
Argentina
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Querida Juana
Supiste dibujar con tu
pluma
el aroma en la copa de la
higuera;
perfume apretujado en el
corazón
de una flor imaginada.
Supiste encontrar la miel
de un fruto,
escondido entre sus ramas sesgadas
Seguro que ella pudo ver,
en el espejo de tus
versos,
una profunda tristeza y su
singular belleza.
Susana Tulián
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Fuente de los
sapos
Te da el ciprés su
plegaria
y cuándo lo hamaca el
viento
juega en chispazos el sol
acariciando al convento
para calmar tu dolor
de soledad y de tiempo
cuatro bocas te bautizan
duendes de piedra en
silencio
Vieja Fuente de los sapos
diste luz al pensamiento
de nuestra Juana de
América
por donde tus sueños
viejos
testaron una leyenda
en el libro de los tiempos
que perpetúan los años
en el corazón de Melo.
Héctor
Pérez Ramírez.
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Fecunda Siembra.
Fecunda siembra que surge
de los campos arachanes
enredada entre las hiedras
y el oro de los
trigales.
Fecunda siembra que surge
galardonando lo simple
y llevarlo a los altares
más encumbrados que
existen.
Fecunda siembra que surge
de una mancha de humedad
sueños locos de una niña
fuente de la eternidad..
Juan. Carlos Cheirasco .
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De esta tierra
(A Juana de América)
De tu cántaro fresco se
desbordan
las lenguas de diamantes y
tu ausencia,
argamasa de letras y de
flores,
con tus manos de nardos y
azucenas.
Las raíces: tu Melo, la
casona, la higuera,
esencia de tu niña pelo al
viento,
esencia de esplendor en
tus poemas.
Cada ocho de marzo te
celebran
los hombres y los duendes
de esta tierra,
redimida, en cantares te
desatas
y vuelves a vibrar en tus
cadencias.
Loreley Molinelli
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Juana de América
La feliz, la amada,
la que mucho sufrió,
la maltratada.
Juana con los ojos mojados
de llanto,
por el esfuerzo de reírse
tanto.
La que hablaba con los ojos a su amante.
Ojos con pupilas
de lenguas de diamante.
Juana, la que veía
en el crepúsculo rosa
todo el oro del mundo
diluido en la tarde
luminosa.
Juana, la que al recibir
su titulo
un anillo le entregaran
como símbolo
de sus desposorios con
América.
Jussara Noradi Lucena
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Siempreviva (fragmento)
Tu nombre sabe a
naranjas
a nardos, a jazmines, a
flores de centeno…
Eres luna de cobre, mujer
enamorada
río impaciente, mujer
rebelde
refugio fecundo, mujer
madre
nuestra Juanita de
trenzas
y su mariposa amarilla con
miel de campo.
“¡Ah, pobre la gente!”,
deja que te llamen loca
aún te brotan rosas en las
manos
rosas, rosas que florecen
los labios de todos.
Tú arrojaste las semillas
y cruzaste la puerta de
los tiempos
porque venciste “el manto
de piedra de la muerte.
¡Estas viva Juana!
¡Viva!
y por siempre viva, por
siempre bella.
¡Aún, aún llevas dalias
frescas en las manos!
Teresa Díaz Sánchez
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Florecieron Rosas
La gran Juana. Oh Juana
poetisa!
con sabor a pitanga en tus
labios
recordando tu raíz salvaje
ramas de sauce ataron tus
trenzas
en primavera el trébol fue
almohada
con el rastro extraño de la
risa loca
para esconder la humedad
del llanto
a veces tan triste como la
higuera del huerto
con ramas grises,
retorcidas y sin capullo
en dulce milagro como
estrellas
de tus manos florecieron
rosas
tus átomos sintieron la
frescura del viento
entonces de noche te
besaron estrellas
y nacieron raíces vivas de
tus poemas,
Oh Juana, la gran Juana de
América!
Lydia Mariel Balbuena